Pocas ciudades del mundo pueden competir con la Ciudad Eterna en términos de número de atracciones turísticas, si es que alguna puede. De hecho, reducir la lista a solo las 10 mejores cosas que hacer en Roma es una tarea bastante complicada. Si busca descubrir increíbles obras maestras históricas y artísticas, esta es decididamente su ciudad. Eche un vistazo a 10 de las mejores a continuación.

1) Explore el Coliseo

La construcción del Coliseo, una de las atracciones turísticas más reconocibles del mundo, se inició en el año 70 de nuestra era bajo el reinado del emperador Vespasiano. En su momento cumbre podía albergar hasta 80 000 espectadores que se congregaban para asistir a sangrientas batallas entre gladiadores, juegos ceremoniales e incluso recreaciones marítimas, ya que ocasionalmente se llenaba de agua.

2) Visite el Circus Maximus

En este enorme estadio, centro deportivo de la antigua Roma, se reunían 250 000 personas para ver las emocionantes carreras de carros. En la actualidad, uno aún puede hacerse idea del tamaño y la escala del Circus Maximus e imaginar cómo debían haber sido esos días de carreras. Casi podrá oír el ensordecedor sonido de los carros aproximándose mientras aumenta el rugido de la muchedumbre.

3) Comuníquese con los dioses en el Panteón

Esta gema arquitectónica, la obra maestra más completa de Roma, es el paradigma de la proporción y la elegancia. Se cree que el agujero que hay en el centro de su tejado en forma de cúpula era una línea directa con los dioses, un conducto al otro mundo.

4) Sienta el poder en el Foro Romano

El foro era el latido de la antigua Roma. El lugar desde donde se dirigía un imperio y donde vivían los emperadores. Paséese entre las ruinas y sienta el poder que antaño fluía por estos corredores. Imagine cómo debía sentirse uno cuando mandaba desde aquí sobre todo el mundo conocido.

5) Lea poesía en las escalinatas de la Plaza de España

Construidas a mediados del siglo XVIII, las gráciles escalinatas de la Plaza de España han inspirado a poetas y artistas a lo largo de los siglos. Llévese un libro con sus poemas favoritos, encuentre un lugar tranquilo en las escalinatas y pase una hora o dos leyendo. Nunca se sabe, tal vez le llegue la inspiración para escribir su propia epopeya.

6) Suba a la Basílica de San Pedro

San Pedro puede ser la iglesia más grande del mundo, el hogar espiritual del catolicismo y el lugar de último descanso del santo del que toma el nombre, pero por encima de todo es una maravilla artística y arquitectónica. Mire a su alrededor y maravíllese ante la majestuosa arquitectura renacentista. Si tiene energía, suba los 500 escalones que conducen a la cima de la espectacular cúpula de Miguel Ángel.

7) Arroje una moneda en la Fontana di Trevi

Dice la leyenda que quien arroje una moneda a la fuente por encima del hombro se asegura una nueva visita a Roma. Si quiere volver a la Ciudad Eterna, mejor empiece a calentar los músculos del brazo. Esta es siempre una de las atracciones turísticas más concurridas de Roma.

8) Recorra los Museos Vaticanos

Con más de 14,5 kilómetros de galerías por explorar y más de 1400 salas y capillas, probablemente no tenga tiempo para verlo todo. Haga lo que pueda, descubriendo gemas ocultas junto a obras de arte tan famosas como los frescos de las Stanze della Segnatura de Rafael.

9) Visite la Capilla Sixtina

Su techo exquisitamente decorado, la obra maestra de Miguel Ángel y una de las obras de arte más famosas del mundo, tardó más de cuatro años en completarse. Alce la vista para maravillarse ante esta increíble proeza creativa. Y piense que Miguel Ángel no pudo ver la obra terminada hasta que se retiraron los andamios una vez finalizado el proceso.

10) Descubra los tesoros del Monte y Museo Palatino

Uno de los yacimientos arqueológicos más increíbles de Roma. Mucho de lo aquí descubierto data de entre los siglos I y IV de nuestra era. Estatuas de mármol y decoraciones arquitectónicas son solo algunas de las piezas cuidadosamente excavadas y expuestas. Según la leyenda, este es el lugar donde nació la antigua Roma.